domingo, 23 de diciembre de 2012

Nuestra guerra

Se perdieron los besos
Bajo el cielo estrellado
Se ganaron batallas
En un mar espumado
Se quebraron los huesos
Sobre el púlpito acolchado
Nos descubrió el día
Como siempre, abrazados.

martes, 18 de diciembre de 2012

viernes, 14 de diciembre de 2012

Transparente envoltura del alma
invisible coraza quebrada
añicos de vida y esperanza
simientes de roturas cristalinas
incurable armadura partida
dolorosa y perpetua herida.

jueves, 13 de diciembre de 2012

Puf

Y así, de un plumazo
parece que no existamos
y el mundo, indiferente
sigue girando y girando
Me mareo y va muy rápido
haz que pare que yo bajo

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Haiku de invierno

Me gusta esto
el olor de la lluvia
y el del viento

3 lines

I used to think 
I used to be 
Like a human being

¿Qué ha sido esto?


Un cuento, una ilusión
una mentira de pasión.

Un juego desgarrador
una rotura de corazón.

Poemsía

La frecuencia de esos besos tuyos
Lo intenso de tu mirar profundo
La alegría de verte,
Felicidad de conocerte
La agonía del no tenerte
Sin ti, perdida, sin rumbo, sin norte
Estaría dando tumbos
En un mar de mundo oscuro
Sin tus ojos, sin tu luz, sin tu latir
Desgarrandome si te veo partir.
Tú, my sun and stars
No quiero nada si tú no estás.

martes, 11 de diciembre de 2012

Llega el momento de partir
pero no quiero irme sin ti
no puedo alejarme de aquí
siento que dejo parte de mí.

Tú marchas a hacer tu ruta
y yo quiero atarme a tu cintura
quererte hasta la locura
ser tu señora, y tu puta.

Es hora de decir "hasta pronto"
besarte los labios cerrando los ojos
girarme en la puerta y decirte: tonto
Sonreír para ti y ser tu todo.

lunes, 10 de diciembre de 2012

Tu olor

Como una brisa marina
ese aroma me hipnotiza
me embelesa cual caricia
es para mí, una delicia.

Esa agua de rocío
que brota tras el brío
la seguiría sin vacilo
cual corriente del río.

Un aroma sensual
como no hay otro igual
me torna pasional
de una forma brutal.

Es tu olor mi droga
que engancha, pero no ahoga.

Es tu olor mi vicio
y no tenerlo, un suplicio.


El cuaderno de Ariadna

Una biblioteca llena de papeles. Con ese inconfundible olor a libros viejos y nuevos. Con ese respeto silencioso de los que llegan y no quieren molestar a los cuerpos vacíos de los viajantes, mejor dicho, de los lectores que han abandonado sus cuerpos a su suerte mientras se sumergen en aventuras, misterios, historias y romances. Mientras viven a través de las palabras mundos que jamás podrían conocer si no fuera a través de ellas.

En un rincón hay una joven sentada, inmersa en un libro que a juzgar por su apariencia ya ha sido leído muchas veces, las páginas amarillentas con bordes oscurecidos y doblados y ese aroma a celulosa apolillada llena de secretos. Lleva consigo un cuaderno grueso. Tiene aspecto de estar muy escrito y varias hojas añadidas sobresalen de las cubiertas.

La chica permanece horas en el rincón atrapada por la lectura, sólo mirarla a ella es hipnótico. Cuando las luces de la biblioteca comienzan a apagarse la muchacha se marcha. Olvida su cuaderno sobre el sillón. El bibliotecario, un hombre con aspecto interesante, canoso, pero lo bastante joven como para no haber cumplido los cincuenta lo recoge. Lo observa con indiferencia y lo mete en el cajón de objetos perdidos. Alguien vendría a reclamarlo, si era importante.

El ajado cuaderno pasa semanas olvidado en aquel cajón de momentos perdidos hasta que un día el bibliotecario lo rescata. Va a tirarlo, pero la curiosidad se lo impide. Lo abre y empieza a leerlo.

"Este es el cuaderno de Ariadna. 
Una locura privada que quiero compartir. Una aventura vivida por culpa de mi madre, la leona, que sembró en mí la semilla de las letras. 
Gracias."


La introducción le resulta interesante y decide seguir. De repente se ve a sí mismo como uno de los visitantes de su biblioteca, completamente absorto en la lectura de aquellas páginas garabateadas. Es la historia de alguien real, la historia de muchas vidas continuadas. No es sólo una vida, el bibliotecario pasa la jornada completa enfrascado en las historias del cuaderno, le fascinan. No puede creer que vidas tan simples como las que se relatan puedan estar tan llenas de emoción y fuerza.

Al día siguiente, bebiendo sorbos de café con las ojeras profundamente marcadas tras una noche de lectura infinita, sigue leyendo. Por fin termina. Mira al frente pensativo y sonríe. Rebusca entre los bártulos de su mesa y coge un papel y un boli. Se detiene unos instantes a mirar a su alrededor, los primeros adictos, ávidos de letras nuevas ya han llegado y tomado posiciones, él es el guardián de sus historias. Sonríe para sí, abre el cuaderno frente a él y empieza a escribir.



Se te olvidó


Se te olvidó que me querías
olvidaste mis caricias y mi calor
te llevaste mi inocencia y mi ilusión
Me quedé lo que no quisiste 
las sonrisas para los días tristes
el amor que yo tenía para los dos
lo dejaste aquí tirado en un cajón.

Todo aquello que dijiste, se te olvidó
cuando decías que siempre seríamos dos
y me abrazabas y me llamabas "tu amor"
Se te olvidó que te creí
se te olvidó que estaba ahí
y ahora tengo algo para ti
algo que se me olvidó
algo que quería darte: 
un simple adiós.

martes, 4 de diciembre de 2012

Mátame

Me desperté aturdido. No sabía muy bien donde estaba, intenté levantarme pero me sentía torpe, aquel tipo estúpido que se había abalanzado sobre mí sin motivo en el bar debía haberme dado una buena tunda, no podía recordar nada después de su cara de enajenado.

Me dolía la cabeza, era un dolor mezclado con ardor y la boca me sabía a sangre. Aún era de noche, supongo que no había pasado demasiado tiempo desde el ataque y que mis amigos seguirían dentro, emborrachándose. Probablemente, ni siquiera hubieran notado mi ausencia.

Finalmente, conseguí ponerme en pie. Caminar se convirtió en todo un reto, los músculos estaban adormecidos y no querían obedecerme. Cuando conseguí mantenerme erguido y dar un par de pasos sin tambalearme decidí explorar el callejón. Sin duda alguna era la parte trasera del bar. No dejaba de pensar en mis amigos, los muy cretinos...

De repente sentí una punzada en el estómago, no me había percatado de que tenía hambre. Seguí avanzando por el callejón buscando la entrada del bar, ya comería algo cuando llegara dentro. Era un caminar patético, más bien se diría que daba tumbos intentando no tropezar.

Por fin llegué a la puerta del local, vi mi reflejo en el cristal, tenía un aspecto horrible. Realmente ese tipo me había dado una buena paliza. Intenté acicalarme un poco con saliva, pero los chorretes de sangre de la camisa eran algo difícil de ocultar. Me acerqué un poco más a mi imagen reflejada y contuve el aliento: "Qué hijo de puta" pensé mientras veía una profunda herida en mi cuello "Podría haberme desangrado". Entré al local malhumorado, dispuesto a cantarles las cuarenta mis supuestos colegas.

"Cabronazos" - grité mientras entraba

La gente del local se giró a mirarme. Me miraban con asco, podía verlo en sus rostros. Busqué entre ellos algún rostro conocido, pero sin duda alguna no estaban. Ya les buscaría más tarde. Me acerqué hasta la barra, tenía muchísima hambre, cada vez más y decidí que necesitaba comer algo antes de la bronca.

El camarero no ocultaba su profundo desagrado al mirarme, me puso de mala gana lo que le pedí y se quedó cerca observándome. "Oye amigo, acábate eso y lárgate de aquí" me dijo con un tono que consideré insultante. Le miré con odio mientras devoraba el bocadillo con ansia. La carne estaba demasiado hecha, seca y por más que bebía agua no conseguía ablandarla. Tras unos cuantos bocados y varios vasos de agua comencé a sentir arcadas. Vomité una guarrería ensangrentada mientras el camarero me gritaba desde el otro lado de la barra "Oye amigo, será mejor que te vayas". Le miré de soslayo, no estaba de humor para recibir otra paliza, aunque curiosamente no me dolía nada, podía ver mis heridas. Me quedé en el sitio mirándolo con desidia hasta que se hartó, salió de la barra indignado y me zarandeó violentamente hacia la salida. 

De un último empujón caí al suelo en mitad de la calle. Sentí una rabia furiosa en mis entrañas y se apoderó de mí la sed de venganza, me levanté con gran rapidez dispuesto a devolverle el golpe, pero cuando le tuve cerca decidí, no sé muy bien por qué, que quería morderle. La emprendí a salvajes bocados con el hombre, que se resistía a golpes.

Los clientes del bar salieron a ayudar al camarero y tuve que salir por patas, al fin y al cabo ellos eran una multitud enfadada y yo un borracho apaleado. Seguí caminando por las calles sin rumbo, y aunque cada cierto tiempo pasaba junto a mi el aroma de comida embriagadora, no podía encontrar la fuente del olor.

De repente me acordé de mi novia. La dije que la llamaría. Seguramente habrían pasado horas, estaría enfadada. Miré el teléfono pensando en llamarla pero sabía que no me iba a creer. Muy oportunamente vi mi imagen reflejada en el cristal de un escaparate y se me encendió la bombilla. Si me veía en tan lamentable estado, me perdonaría y me cuidaría y curaría amorosamente las heridas. Estaba decidido, me presentaría en su casa.

Por el camino ví un grupo de gente atacando a una muchacha. Me pareció terrible, y decidí ayudarla. Me aproximé a ellos lo más sigilosamente que pude e intenté gritarles, pero notaba una profunda quemazón en la garganta. No recuerdo qué paso en los minutos siguientes, me desperté desorientado en otro lugar. Debía ser a causa de los golpes. Quizá el muy imbécil me hubiera causado un daño cerebral. Quizá debería ir a un hospital, pero antes quería verla a ella.

Logré encontrar su calle con bastante dificultad. Pero por fin estaba allí. Llamé al telefonillo y al otro lado contestó una voz somnolienta. Me abrió. 

Al llegar a la puerta del piso me fijé en su cara, estaba muy pero que muy enfadada, pero cuando me vio su enfado fue desapareciendo y me miró con una expresión mezcla de preocupación, incredulidad, dolor, asco y pena. No podría definir mejor aquella cara. Se arrojó a mis brazos casi llorando "¡Dios mío!¿Qué te ha pasado?" Repetía una y otra vez. Cuando noté su cuerpo contra el mío me percaté de lo bien que olía, nunca lo había notado.

Me hizo pasar a su casa y como yo había supuesto se esmeró en cuidarme. Me curaba y me besaba en una especie de danza rítmica acompañada de melodiosos "¿Te duele?" a los que yo contestaba negando con la cabeza. Estaba tan agusto en su presencia...

Me convenció de que necesitaba descansar, aunque no estaba cansado, y me arrastró a la cama. Me encantaba sentirla tan cerca, tan suave, tan cálida. Me relajé a su lado y en pocos instantes perdí la consciencia. Cuando me desperté ella no estaba. Me asusté. Revolví las sábanas y salí lentamente de la cama, no me dolía nada pero mis músculos estaban anquilosados y no respondían con la agilidad que yo quisiera. Intenté llamarla, pero de mi garganta sólo salían ruidos guturales parecidos a los gruñidos de una fiera. entonces ella entró en la habitación corriendo y preguntándome "¿Qué te pasa?". Me relajé. Sólo verla me bastaba.

La hice un gesto con los brazos, quería abrazarla. Ella respondió enseguida y se apretó contra mi pecho. Su esencia hacía que me escociera la garganta. La aparté y la miré a sus preciosos ojos confundidos. "Te quiero" logré articular con gran esfuerzo. "Yo también te quiero, amor" contestó preocupada "¿Qué te pasa?". No sabía responder, solo sabía que tenía que irme. Me levanté, me ví en el espejo, empezaba a entenderlo. Salí de la casa entre sus súplicas y lágrimas. 

Deseaba quedarme con ella para siempre, pero tenía mucho hambre y su olor hacía que desease devorarla.

Salí a la calle, la luz del sol, brillante, me cegaba. En algún momento perdí el rumbo y mientras la maraña de pensamientos que se agolpaba en mi mente me torturaba, supe que yo ya no era yo.

No recuerdo mucho más de aquel día, algunas ráfagas de imágenes violentas que de vez en cuando sacudían mi mente, me estaba perdiendo a mi mismo en aquel mar de confusión. Al caer la noche aparecí en su portal, deseaba llamar al timbre y verla. Abrazarla. Sentirla de nuevo tierna y amorosa entre mis brazos, tan pequeña, tan frágil. No sabía qué podía hacer, "¿cómo iba a entenderlo?".

Subí lenta y torpemente hasta la puerta. Me paré en seco frente a ella "¿cómo iba a decírselo?" "¿y si simplemente me había vuelto loco?". Decidí marcharme, dí media vuelta y comencé a alejarme de ella con pesadez. Oí abrirse la puerta a mis espaldas y su dulce voz "Amor, ¿eres tú?". Estaba decidido a irme, pero no podía hacerlo. No podía marcharme como si nada y dejarla allí, sola y preocupada asomada a la puerta. Me giré. Cuando la ví y ella me vió descubrí una horrible mueca de espanto en su rostro y corrió hacia mí los cinco o seis pasos que nos separaban "¿qué te ha pasado?" susurró en mi oído. Me abrazó y me besó mientras sus ojos se llenaban de lágrimas. Quería contestarla, pero no me atrevía a soltarla.

"Estoy muerto, amor" confesé finalmente. Ella se apartó de mi y me observó con una mezcla de incredulidad e incertidumbre. Mi palidez era mortecina. Mis ojos vidriosos carentes de luz y vida. Mis heridas expuestas al aire y mi ropa cubierta de sangre. Parpadeó con fuerza y dos lagrimones brotaron de sus ojos. Deseaba tanto calmar su pena... "He de irme, amor" dije haciendo acopio de valor y fuerzas "No puedo quedarme". Me separé unos metros de ella dejándola cabizbaja y ausente y comencé a alejarme. Noté entonces cómo ella asía mi brazo con fuerza, reteniéndome. "¿Y ahora qué?" pregunté intentando hacerme el duro.

Ella me miró a los ojos desafiante. "Quiero estar contigo" susurró mientras bajaba la mirada. Ladeó la cabeza apretando los ojos y los labios. Volvió a mirarme, con más determinación esta vez. "Quiero estar contigo siempre" repitió alzando la voz suavemente. La apreté contra mi pecho fuertemente y entonces ella dijo algo que podría mantenernos unidos para siempre. Se apartó de mi, cogió mi cara entre sus manos y suplicó "Mátame".


Poesía

Decirte con palabras vagas
lo que inhunda mi alma
lo que no expresa mi garganta
los secretos de quien te ama.

Susurrarte una mentira
para arrancarte una sonrisa
y robarte mil caricias
de las que hacen mis delicias.

Ser tu amante y tu amor
calmar contigo mi ardor
Dedicarte poesías,
que las leas y sonrías.

lunes, 3 de diciembre de 2012

Te quiero, te odio, te mimo



Rivalizas conmigo
te grito al oído
te enfado
y te hastío
te amo
y te sigo.

Me enfurezco,
me vuelvo loca
y muero por un beso de tu boca.

Tan pronto río
tan pronto lloro
mas todo lo que tu mano toca
se vuelve oro.

Te entristeces,
me pongo tonta,
y sin saber cómo, mi sonrisa aflora
no puedo entenderlo a veces
pero no me importa.

Te quiero, te odio, te mimo
Lo que sea, pero contigo.

jueves, 29 de noviembre de 2012

Naïs

Nunca me ha gustado la ciudad en la que me veo obligada a vivir. Tampoco me gusta la vida - por llamarlo de alguna manera - que llevo, ni el papel que tengo que interpretar.

He fantaseado con la idea del suicidio muchas veces, pero mi condición de inmortal me arrebata ese privilegio romántico reservado a los frágiles humanos.

Soy una exterminadora. Los mortales han aprendido a reconocernos y temernos. Extraño los tiempos en los que se podía pasar desapercibido entre ellos y disfrutar de los pequeños placeres de los que disfrutan ellos.

A menudo sueño que soy humana, que algún día, moriré como ellos. Una vez amé a un mortal, pero me abandonó cuando descubrió lo que era y tuve que eliminarlo. Aún no he logrado superarlo. Se supone que no debemos tener sentimientos, somos miembros de la Armada Inmortal, somos los encargados de mantener el orden y eliminar a los sujetos discordantes. Mi escuadrón tiene asignada una gran zona, se supone que hemos de patrullar por las calles y vigilar. A mi me aburre, con demasiada frecuencia me descubro contemplando el lugar donde una vez fui feliz con un hombre o espiando a un grupo, una pareja o una persona concreta. Me fascinan.

Físicamente somos iguales que ellos, el mismo aspecto, los mismos gestos. Pero nosotros no podemos sentir, estamos huecos o rellenos de cables y chips. Me sorprende que nuestros jefes sean también humanos. La última vez que intenté suicidarme les oí decir que yo tenía algún fallo, pero según ellos debía estar reparado, no podían entender qué me ocurría. Yo tampoco lo entiendo.

Ahora soy una fugitiva. Mi propio escuadrón intenta eliminarme. Al parecer soy una amenaza, algo que se sale del rígido sistema que han instaurado durante el paso de muchos años.

Sé que sólo soy una máquina, una cosa, un "it", pero desde el día en que lo eliminé a él, y puede que desde antes, descubrí que podía sentir. La solución fácil sería dejar que me atraparan, un reseteo o una desconexión y solucionado. Sin embargo, algo dentro de mí - puede que un cortocicuito, no lo sé - me empuja a huir. 

Siento que él no merece que me deje morir. Creo que si yo desaparezco él desaparecerá para siempre y esa idea me parece algo atroz. Hace poco descubrí un sentimiento nuevo, venganza. Sé que fui yo quien acabó con él, mis propias manos fueron las que le arrebataron la vida y su último aliento fue para mí. Ya no quiero matar mortales, quiero exterminar a la Armada Inmortal y haré lo que sea para llegar a tal fin.
Pero quizá debería haber empezado por el principio:

Mi nombre es Naïs...




    Piensas que no eres un romántico, que la vida te ha dado muchos palos y has aprendido a sobrevivir siendo duro, dejando que la vida pase de largo mientras te empeñas en ignorarla.

    Y entonces una mañana te despiertas y te das cuenta de lo mucho que extrañas su sonrisa, su voz, su olor. Ese aroma de piel sudada y perfume que te embriaga cuando está cerca, que permanece en su almohada aunque ya no esté en ella. Y te das cuenta del engaño, descubres que es demasiado tarde para alejarte de un fuego que te quema, pero no importa.

    Podría ser cualquiera, pero es esa persona, esa y no otra, la que te desvela, su mirada, su inocencia, su personalidad, y te das cuenta de que no puedes vivir sin ella, da igual cómo, da igual dónde, pero con ella. 

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Ahora me toca a mí

"Ahora me toca a mí" - susurró él con una dulzura apasionada. 

Sin apartarse de ella, sin siquiera salir de su turbado cuerpo, que aún se estremecía de placer bajo el peso de su ser, comenzó a acelerar la cadencia de sus rítmicos movimientos, y ella ruborizada por el éxtasis que acababa de experimentar se aferraba con fuerza al cuerpo desnudo de su hombre.

Con cada acometida él se aproximaba más y más al orgásmico desenlace arrastrando con él a su amante, quien involuntariamente hincaba uñas y dientes en la carne de aquel que la hacía enloquecer en su romántico y frenético encuentro.

Por fin él llegó al clímax y una cascada blanca y brillante emanó de su sexo rociando el cuerpo de la mujer que le tenía por el hombre de sus sueños.

"¿Te gustó?" - preguntó ella tímidamente

Él la miró y la dedicó una dulce sonrisa, sin mediar palabra acercó a la mujer contra su cuerpo, la besó con ternura y la abrazó con fuerza mientras ella se acurrucaba en su pecho.

Pasaron largo rato tendidos sobre el lecho, sin mediar palabra, atesorando momentos, hasta que ella habló de nuevo.

"¿Y ahora, a quién le toca?"

martes, 27 de noviembre de 2012

.

Y de pronto todo se desvanece y se queda en nada,
y un vacío y un eco de algo que nunca sucedió te llena el alma
Esa sonrisa que esbozabas es ya una mueca apática
y el brillo de tus ojos se lo dan ahora las lágrimas
Ese creer que eres cuando en realidad no eres nada
Ese creer que importas, cuando eres secundaria.

viernes, 23 de noviembre de 2012

Loto

En la gruta del loto morado
siguiendo el canal del río embrujado
un encuentro sobre un lecho apasionado
y un amor, con un beso sellado.

Un deseo ardiente consumado
con un amante loco y hechizado.
Locura que me ha hipnotizado
en la gruta del loto morado.

Poema sin nombre

Esa noche junto a ti creí morir
luego llegó el día y se burló de mí.
Las luces del cielo rosa y carmesí
me devuelven a una rutina fría sin ti.
Aún recuerdo aquellas noches sin dormir
donde las horas eran mares de caricias sin fin.
Cuando no existía nada más que tú sobre mí.




martes, 13 de noviembre de 2012

La chica de los ojos cambiantes

Es una chica normal, común, del montón.

Una chica sin nada especial salvo el color de sus ojos, esos ojos de color indefinido y cambiante que varían según la hora del día y de su humor. Nunca nadie, ni siquiera ella misma, se ha molestado en fijarse qué significa o por qué o cuando se produce el cambio de color, pero no la importa.

Sabe que cuando se despierta pensando en él, el color es más verde, más hermoso. No sabe por qué, ni tampoco si tendrá algo que ver, pero la gusta pensar que sí, la gusta pensar que refleja lo que siente en sus ojos.

La chica de los ojos cambiantes sueña con evadirse de la realidad, la gusta menos el mundo cuando él no está cerca, es más anodino, más mediocre, más gris y más aburrido.Quiere llegar a casa y encontrar entre sus brazos cobijo de la vorágine de la rutina. 

Ella quiere que juntos puedan jugar al escondite con el tiempo, y quiere que sus ojos se pinten de colores para expresar sus sentimientos. 

Pero la chica de los ojos cambiantes tiene miedo, miedo de que las ilusiones se las lleve el viento, miedo de despertar y ver sus ojos negros, miedo de que todo haya sido un sueño.


lunes, 12 de noviembre de 2012

¿Y si un vampiro mordiera a un zombie?

Ésta es la pregunta planteada por una amiga mía, y que he intentado responder en mi mente...
Un vampiro es un ser "inmortal" que bebe sangre (preferiblemente humana) y con super-fuerza, aversión a la luz solar y, según las pelis, generalmente bien parecidos y una forma de muertos vivientes.
Un zombie es un ser "inmortal" que come carne (preferiblemente humana) y con super-fuerza, indiferencia a la luz solar y, según las pelis, físicamente desagradables putrefactos y a cachos, y por supuesto, una forma de muertos vivientes.

Si un vampiro te muerde y no te seca, te conviertes en vampiro, si un zombie te muerde y no te come entero,  te conviertes en zombie.

Los vampiros se regeneran, los zombies se pudren.
Hasta aquí todo aclarado.

Entonces, si un vampiro mordiera a un zombie... ¿Tendríamos un vampiro zombie y un zombie vampiro? ¿En qué derivaría eso? Quiero decir, ¿dos nuevas razas de criaturas devora-humanos? ¿En qué cambiaría un vampiro convertido en zombie? Quizá sería resistente a la luz solar como los zombies, y caminaría como en el videoclip de thiller. ¿Y un zombie convertido en vampiro? ¿Se regeneraría? ¿Sería resistente a las balas?

Pero claro, eso si en la transformación se quedan con lo guay del otro, pero ¿y si no? ¿Y si el vampiro zombie se vuelve medio lelo?, ¿y si se le caen cachos y no se regenera? Sería como una cosa paliducha y vieja con mirada perdida y cachos colgando dando vueltas sin sentido. ¿Y el zombie vampiro? ¿Le afectará el sol?¿Huirá del ajo?

Si tomamos como referencia las últimas pelis que se han hecho... Si un vampiro muerde a un zombie... ¿Se convertirá el zombie en una masa de carne putrefacta que brilla con purpurina si le da el sol? ¿Se podrán combatir con desmaquillante en las horas del día? Y si mezclan mucho y las cosas salen al revés... ¿Habrá que temer a los zombies de noche y a los vampiros de día?

Es una pregunta demasiado compleja para poder respondida a la ligera. Necesita seria meditación y consideración, puede que algún día halle la respuesta y te conteste, amiga. Hoy desde luego, no.

** Nota del 13/11/2012: No discutáis sobre esto con personas de nivel friki superior, os darán razones (con lógica meditada) de por qué no pueden pasar ciertas cosas. Y dejan tu lógica no meditada aplastada, no mola. Discutid con gente con un nivel similar de frikismo, es más diver.

viernes, 9 de noviembre de 2012

El señor de mi casa

Y el deseo se filtra por los poros de mi piel
mientras mis labios ansían probar tu miel
y espero impaciente a que llegue a la hora
de verte de nuevo y enroscarme cual boa.

Sólo quisiera poder poseerte
hacerte mío y dejarte inerte
sentirme tuya, poder morderte
despertarte y complacerte.

Sé por siempre el señor de mi casa
el único habitante de mi alma
tú, el dueño de mi mente
tú, mi pensamiento latente.


miércoles, 7 de noviembre de 2012

Corriente

Se levantó, podía ser un día cualquiera, podía ser hoy.

Hacía mucho frío entorno a ella. La soledad le pesaba, se sentía triste, vacía. No lograba comprender cómo había llegado hasta el punto en el que estaba.

Con pesadez comenzó su rutina, abrió el grifo de la ducha y el eco del agua cayendo se convirtió en sus propias lágrimas y mirando en el espejo su propia cara dejó que su mente pensara.

Había intentado dejar que todo fluyera, que llegara a donde tenía que llegar, y era lo que había pasado. No se arrepentía de las decisiones que la habían llevado hasta allí, pero a veces miraba hacia atrás y se sentía desgraciada. Echaba de menos los momentos vividos, pero sobre todo, echaba de menos al amigo con el que siempre contaba.
Sabía que en algún momento que no lograba encontrar en su memoria todo se había roto, y desde aquel mismo instante inexistente nada había vuelto a ser lo mismo. Sin embargo, una parte de ella se alegraba, se sentía liberada.
Esa parte alegre iba ganando cada vez más terreno en su día y día aunque algunos días la vencía la morriña.
Cada persona con la que hablaba, cada sonrisa recibida, cada minuto regalado la llevaban a un nuevo estado, a la expectación del qué pasará mañana, al querer saber en qué desembocará su nueva historia, al querer querer de nuevo y ser amada. Al despertarse y ver su cara.

Seguía haciendo frío alrededor y su mirada, como todo lo demás, seguía empañada. Se sentía culpable por no estar más herida tras el naufragio, por no estar hundida en su propia desgracia. Pero el sol empezaba a brillar fuera de la casa y dentro de su alma.

Todas las palabras bien y malintencionadas se arremolinaban en su cerebro, sabía lo que esperaban de ella, pero sentía que sólo los peces muertos siguen la corriente del río y ella, aunque aún fría, se sentía muy viva.

Limpió el vaho para volver a ver su reflejo y se dedicó a sí misma una gran sonrisa, se miró a los ojos y se dijo: Buenos días.

Pensamientos

Y se empeñan en confrontarse entre sí
en encontrarse en mi laberinto gris
en arrastrarme hacia la salida errónea
se empeñan en volverme loca.
Yo me niego a seguirles el juego
pero ellos insisten de nuevo
no quiero pensar, no puedo
cada uno me martillea desde dentro
Y ¿qué puedo hacer si ya no puedo?
¿Qué debo hacer si ya no quiero?

lunes, 5 de noviembre de 2012

Lunes

Lunes.
Todo (o casi todo) el mundo les tiene manía a los lunes. Yo también.
¿Por qué? 
Bueno, yo no sé por qué la gente odia los lunes, puede que sea porque precede al martes, pero yo creo que es más bien porque sigue al domingo. Porque es inicio de la semana laboral, la vuelta a la rutina, al coge el teléfono, sonríe y sella. 
Tal vez sea mi afición a cierto gato naranja perezoso y gordo amante de la lasaña cuyo odio a los lunes es legendario, quizá se me haya pegado porque estoy segura de que las manías se contagian.Quizá no, no lo sé ¿a quién le importa?
Lunes. Así en principio y de vacaciones, no se me antoja un día especialmente malo. Es más, me parece un día genial, los lunes de vacaciones son incluso mejores que los sábados, creedme. ¿Por qué? Te levantas tarde, es lunes y el despertador no ha sonado, ya solo por eso amaneces sonriendo.Se ha acabado el finde, pero para ti no. Miras por la ventana y tu parte mala, tu diablillo, se regodea observando a los pobres infelices que van a trabajar, en lunes.
Hoy es lunes y aquí estoy, en un rato muerto en el trabajo, no debería quejarme, supongo. Pero sólo puedo pensar una cosa: un poco más y será martes, un día menos para el finde.

viernes, 2 de noviembre de 2012

A mi sol radiante

Hace ya años que te fuiste
y te recuerdo como ayer
tu sonrisa cómplice
y tu arrugada piel.

Mi más fiel compinche
mi gran amigo,
mi abuelo y mi abrigo.

Con tu corona de canas
y tu voz dulce aunque ajada.
Recuerdo los paseos de campo
mientras mordías brotes de parra.

Pícaro desdentado,
piropeador innato,
besucón y cuentacuentos.
Te echo de menos, abuelo.

lunes, 29 de octubre de 2012

Adiós

A veces miro hacia atrás y el tiempo me duele
Recuerdo las risas y los momentos
La ausencia de ello aún me hiere.

Te miro a los ojos y no logro verte
Te perdiste y nos perdimos mutuamente
Al final las palabras volaron en los vientos
Y no quedó nada aparte de recuerdos.

Eres un adiós clavado en mi mente,
Un quise y no pude,
Un: "vete".

miércoles, 24 de octubre de 2012

Quiero...

Quiero escaparme a otro mundo paralelo
donde alimentarme sólo con tus besos
un mundo en el que mi sol sea tu cuerpo
un paraíso, un escondite sólo nuestro
donde la realidad parezca un sueño
un sueño tuyo, un sueño mío, un sueño eterno.

lunes, 8 de octubre de 2012

Principio y fin

Todo empieza y se acaba. A veces tenemos miedo al cambio, a perder la rutina, la costumbre, a arrepentirnos, a perder algo. Pero a veces la pérdida no es tal, a veces es sólo un cambio, a veces las cosas las elige el destino, y a veces parece que el destino está escrito en las estrellas. 

Pero ¿quién sabe qué pasará mañana?

Sería fantástico tener una bola de cristal que nos dijera qué va a pasar, pero eso destruiría, en parte, la magia ¿no? Sin embargo cuando uno se enfrenta a una decisión trascendental... ¿quién piensa en la magia?

Los cambios no siempre son malos, al fin y al cabo, un cambio no es más que un nuevo comienzo y sin embargo muchas veces es precisamente ese algo nuevo lo que nos da miedo, ese "y si" que no nos deja dormir, que nos atormenta. 

Como decía Bruce Lee en aquella famosa entrevista "be water my friend". Quizás sea mejor dejar que fluya, lo que tenga que ser, tarde o temprano, será.

martes, 2 de octubre de 2012

Hold me tight

Hold me tight
let's fight
against the light
be with me tonight
be my knight
give me your bite
and hold me tight.

Lágrimas secas

Desde por la mañana y sin saber por qué me desperté triste. Ni siquiera las luces anaranjadas y violáceas del amanecer consiguieron arrancarme una sonrisa. De repente era lunes y volvía a la rutina, no me desagrada especialmente mi rutina, pero este lunes se presentaba especialmente difícil.
Un millón de pensamientos inconexos amenazaban con colapsar mi cerebro y mis ojos se empañaban cada rato sin desbordar ni una sola gota.
Un día estúpido, lleno de lágrimas secas, que desfiló ante mí como si yo fuera un simple espejo, parte de un mundo ajeno al mundo que veía en mi mente en ese momento.


viernes, 28 de septiembre de 2012

Abismo

Me fundo en tu cuerpo, me pierdo en tus labios
Mi latir se acompasa al ritmo de tus manos
Y me estremezco y tiemblo bajo tu contacto
Olvidándome del mundo y de los demonios
Y la luna nos mira mientras nos besamos
Y el mundo se convierte en algo abstracto
Pero tu sudor y el mío son el mismo
Aunque nos lleve al abismo.

martes, 25 de septiembre de 2012

Llueve

El cielo está gris, parece que hace horas que oscureció y son sólo las cinco de la tarde.

La lluvia furiosa cae frenética contra todo lo que encuentra en su camino, precipitándose desde los densos nubarrones y humedeciéndolo todo.

Llueve y me gustaría estar bajo la lluvia, cantando, riendo y saltando charcos, como si tuviera de nuevo cinco años. Luego llegar a casa y disfrutar de unas horas de sofá y mantita acurrucada junto al felino recuperando el calor. Observando la lluvia a través del cristal salpicado, mientras disfruto de la calma de mi hogar.

Pero no tengo cinco años y no puedo salir a jugar y el cielo está enladrillado, ¿Quién lo desenladrillará?

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Hoy la luna tiene forma de uña mordisqueada
y soñaré contigo abrazada a la almohada

jueves, 13 de septiembre de 2012

El baile de nadie

Desperté de golpe, como si hasta ese momento yo no hubiera sido yo, como si hubiera estado viviendo otra vida, la vida de otra persona, miré a mi alrededor intentando ubicarme. Estaba en una habitación iluminada tenuemente, con una música pegajosa bastante familiar saliendo de un mp3 conectado a unos buffles. Tardé unos instantes en percibir a los 7 hombres que me observaban expectantes a través del denso humo de cigarrillos y porros. Empecé a bailar y a moverme sinuosamente, acercándome a ellos insinuándome, dejando entrever mi cuerpo debajo del ajustado traje. Me contoneaba de forma sensual delante de sus ojos, era divertido, sexy. Desabroché el top del traje y fui retirándolo muy lentamente sin dejar de balancear mis curvas ante las miradas expectantes y lascivas de mi público particular. 

Me acerqué al hombre del centro, parecía el más tímido. Apoyé el tacón de aguja de mis botas de cuero sobre su pecho y le obligué a desabrocharla lentamente.El resto empezó a jalear al hombre que estaba bajo mi tacón, estaba cohibido, pero había deseo en su mirada.Bajé la bota a medio desabrochar y agarré sus manos temblorosas con firmeza poniendolas sobre mi cadera, me senté sobre él y me quité el top por completo dejando mis pechos al descubierto, sus manos se tensaron en mi espalda, y no fue lo único. 

Sus compañeros comenzaron a gritar emocionados y se fueron acercando, cada vez más manos tocaban mi cuerpo y me desmayé.

Desperté de golpe, como si hubiera vivido el instante de una vida que no fuera la mía, observé todo lo que me rodeaba, parecían los mismos muebles anodinos de mi casa, y sin embargo, sentía la necesidad de bailar.

Celos

Siento celos del aire
que puede acariciarte
Celos de las sábanas
que comparten tus lágrimas.
De las teclas que acaricias
del humo que respiras.
Del espejo en que te miras
Celos de la vida misma.

martes, 4 de septiembre de 2012

Inercia


Iba camino del trabajo en otro tedioso y rutinario día. Iba en el coche, escuchando la radio, como siempre, las mismas canciones, las mismas voces, la misma sensación de ser un zombi. Conduciendo por inercia con los movimientos ya aprendidos y la mirada perdida en algún punto de la carretera.  De repente escuché una nueva canción, una que cambiaría mi vida para siempre, no recuerdo el título, ni siquiera la melodía, pero me obligó a detener el coche y respirar agitadamente mirando perpleja el aparato de radio como si pudiera darme alguna explicación de lo que estaba sonando.

Era como si alguien hubiera explorado los laberintos de mi mente y hubiera plasmado mis miedos y deseos más profundos en una simple letra. Era como escuchar la voz de mi yo interior gritándome con fuerza.

Cuando la canción terminó todo pareció quedarse en silencio, la radio seguía encendida, pero era como un susurro de palabras inconexas y sin sentido y en mi cabeza retumbaban las palabras que acababa de oír. Sentía mi corazón latir violentamente, estaba nerviosa, como si todo el mundo hubiera descubierto mis secretos, sin saberlo.

Apreté con fuerza el volante dispuesta a reanudar mi camino al trabajo, pero entonces me dio la risa, una risa histérica y descontrolada. Nadie jamás sabría mi secreto. Era estúpida por pensar que mis pensamientos y mi forma de sentir sería única, por supuesto que miles de cientos piensan y sienten parecido, cada uno con los matices de su propia experiencia, pero al fin y al cabo, tan simples como los míos.

Ahora podría aprender aquella letra y sentirme liberada gritando al cielo, fingiendo que es la canción de otro, la vida de otro. Y sin embargo me sentía triste, como si hubiera perdido una parte importante de mí, y de pronto estuviera vacía.

Solté el volante y empecé a llorar, me sentía estúpidamente bipolar. Salí del coche. Necesitaba desesperadamente respirar aire fresco, pero había mucho humo, necesitaba correr y casi involuntariamente comencé a hacerlo. Oía los cláxones furiosos de los otros coches dirigiéndose a mí, les veía pasar veloces a mi lado, esquivándome. Me daba igual, necesitaba llegar al otro lado, y entonces un chillido neumático y un fuerte golpe. 

Dejé de sentir. 

viernes, 31 de agosto de 2012

Soñé tu sueño


Allí estaba yo, en medio de nada. Arrullada por las olas y la brisa marina, mirando a las estrellas. Debía ser más de media noche y el calor estival acariciaba mi piel desnuda sobre la cubierta del velero. Hacía días que no veía a nadie, tampoco me importaba. La atmósfera que me envolvía era mágica, sentía el olor del agua. El salitre adornaba mi cuerpo que brillaba tenuemente en la luz de la noche. La madera estaba caliente debajo de mí y mis manos revoltosas jugaban a alterar mi ser.

De repente una melodía interrumpió mi calma. Me incorporé sobresaltada y descubrí una pequeña cala, aislada de todo con gente bailando y riendo junto a un fuego. En otro momento quizás les hubiera odiado, pero algo en mi interior se sentía arrastrado hacia aquella playa.

Acerqué mi barquito a la orilla oscura de la playa, desde donde no pudieran verme. Cubrí mi cuerpo con un pareo blanco y me dispuse a bajar. Al saltar a la arena la noté húmeda y fría, enredándose entre mis dedos. Sentía cómo me decía: “Ven”.

Me acerqué lentamente a la zona de la hoguera, el olor a madera quemada y humo de inciensos y hierbas era cada vez más intenso, más embriagador, pero cuando llegué a ella, no había nadie. Me dejé caer sobre uno de los troncos que había frente al fuego, en parte abatida, en parte contenta. El sonido y el calor del fuego combinado el frescor de la brisa y el sonido del mar eran hechizantes, me relajaban de una manera extrema y a la vez hacían arder una sensación poco inocente en mis venas.

Decidí levantarme y darme un baño en las tranquilas aguas. El agua estaba fría, tonificante. Recorría todos mis recovecos regalándome su frescor. Sentí entonces una presencia a mi lado, me giré, era un hombre. Nos miramos unos instantes sin decirnos nada y decidí salir del agua, él se quedó.

Me tumbé junto a la hoguera, miré mi cuerpo, estaba chorreando, el pareo blanco era casi una segunda piel transparente que dejaba ver todo mi ser a la luz del fuego. Miré hacia el mar, y allí estaba él, caminando hacia la orilla con un fondo de estrellas.

Sabía que debía irme, pero algo me obligaba a quedarme, no podía apartar la vista de él, se acercó lentamente al fuego y se detuvo junto a él, mirándome, igual que yo no podía apartar los ojos de los suyos. A la luz de las llamas se veía hermoso, grande y fuerte.

Ruborizada, aparté la vista. Él siguió mirándome, podía sentir la fuerza de su mirada atravesándome. Estaba excitada. Una parte de mí quería irse, sabía que no debía estar allí, que no podía ser, pero el deseo era más y más fuerte cada vez.

Él se aproximó y se tumbó junto a mí, obligándome a mirarle. Apoyo su mano en mi cintura delicadamente y permaneció inmóvil, embrujándome. Necesitaba tocarle, parecía tan perfecto, tan irreal. Estiré la mano hasta llegar a su cuerpo. Su piel era tersa y suave. Miré mi propia mano jugueteando con el pelo de su pecho, parecía una mano ajena. Levanté la vista hasta encontrarme con sus profundos ojos. Él seguía inmóvil, sin apartar su mirada de mí, reí nerviosa y él se mordió el labio inferior. Me fijé por primera vez en sus labios, deseaba besarlos pero no me moví.

Su sola presencia me alteraba, me hacía sentir frágil y vulnerable, me daba vergüenza. Me sentía como una chiquilla tonta en un juego de mayores, pero mi cuerpo sentía unas pasiones muy adultas. Unas lágrimas sin sentido brotaron de mis ojos y él apartó su mano de mi cintura y acarició mis mejillas secándolas. Deseaba abalanzarme sobre él, poseerle, hacerle mío y en vez de eso le abracé. Él me envolvió con sus brazos y me apretó con fuerza contra su pecho.

Era una sensación extremadamente placentera, podía sentir su olor, su calor, su protección. Deseaba que el mundo se detuviera para siempre en aquel instante. Deseaba quedarme eternamente entre sus brazos.

La hoguera comenzó a chisporrotear, un humo gris y dulzón empezó a inundarlo todo. Todo desapareció tras la densa cortina de humo y un sonido agudo y estridente se entremezcló con el sonido del mar y el fuego. Ya no podía verle, pero aún podía sentir su calidez, su presencia. Intenté aferrarme a él con todas mis fuerzas pero el humo era cada vez más molesto y el martilleante sonido más intenso. Cerré los ojos y al abrirlos no había nada.

Estaba sola, tendida en mi cama con la alarma del móvil indicándome que era la hora. Volví a cerrar los ojos en un intento vano de hacerle regresar, de traer de vuelta a mi barco, a mi hombre y a mi playa; pero la luz del día ya se colaba entre las rendijas de la persiana creando una nueva magia. Me quedé varios minutos intentando asimilar que solo había sido un sueño, una dulce fantasía, aún podía sentirlo todo, tan real, tan fantástico.

Creo que esta noche olvidaré poner la alarma.

jueves, 30 de agosto de 2012

Cuento de realidad con una pizca de sal

Ágata quería ser feliz, soñaba con unicornios y arco iris hermosos.
Ágata despertó, y el mundo la asustó.
Lleno de injusticias, completamente loco.
Ágata quiere dormir abrazando a su oso.

Jorge quería jugar los lunes con su papá
Papá llegaba agotado, no había encontrado trabajo.
Jorge quería vivir en una casa junto a la playa
Ahora viven muy juntitos dentro de una caja.

María quería tener un pony, cepillarle y ponerle nombre.
En época de bonanza, papá y mamá se lo regalan
María está contenta con su pony: Princesa
Pero llegan las vacas flacas y del pony se alimentan.

Juan quería ser rico, para ayudar a los pobres
Quería ser el Robin Hood de los tiempos actuales
Un día Juan descubrió que en su casa había hambre
Y deseó que Robin Hood viniera a salvarle.

Ágata, Jorge, María y Juan nunca existieron
pero sí otros muchos como ellos.
Y colorín colorado,
éste cuento sólo ha comenzado.

Animal instinct


No matter what you dream
No matter what you want
I’ll try to make it true
I’ll do whatever it takes
To be your she wolf.

My world revolves around you
You, the sun of my universe
You, the brightest star
I’m on the influx of your light.
Everything is darkness outside.

I’m captivated by your mind,
In love with your animal side.

lunes, 27 de agosto de 2012

En mi pueblo, orinales

Este año a San Roque
unas fueron a bailar
las otras comiendo pipas
esperaban en el bar
y como faltaba Ana
no se oyó ningún cantar
pero tuvo la decencia
de mandarnos un trivial
unas lágrimas de pena
y muchas risas al final
de un Party & Orix
y de Orix, "orixnal"

Como nuevo la gymkana,
divertida de verdad
todo el pueblo compitiendo
para ver quién sabe más
gracias a los organizadores
que se lo tuvieron que currar
entre ellos a María,
Orix original.

Además en 2012
han faltado muchas más
aunque una vino en romanos,
de las otras no sé ná.
Cantares hubo en las marzas
las joteras y una más
aunque con las plumas rojas
no pudo destacar.

Las putillas del Dios Baco
este año mucho más,
con el jugo de cebada
y el calor estival,
para el olor de sobaco
vino tinto y tabaco.
Tabernera sexy Rita
la más bella del lugar
con su traje de misterio
y su sonrisa sin igual.
Gema la "sesual"
tuvo dolor menstrual
y no pudo disfrutar
la divina Bacanal.

Y con este poemilla
Dante quiere terminar
que aunque no mencione a todas
todas ORIX por igual.

viernes, 24 de agosto de 2012

Fantasies

Your image is so breathtaking
can't sleep, can't eat, fantasizing
daydreaming your smile and body
you drive me crazy without even know it

I just fancy you and your naivety
I want to persuade and steal your kisses
taking off your clothes and enjoying your nudity.

martes, 21 de agosto de 2012

La trama se complica



Nada es nunca tan fácil como debería ser, o como desearíamos que fuera, como en una película de serie B, cuando parece que el clímax va llegar al desenlace, se produce un nuevo giro narrativo, una nueva vuelta de tuerca en la historia y la trama se complica.
Si fuera una película sería menos difícil y más entretenida, el problema viene cuando se trata de tu propia vida, de las decisiones que harán que tu destino sea de una manera o de otra diametralmente opuesta.

¿Qué es lo correcto?

Es una pregunta demasiado ambigua como para poder ser respondida a la ligera. Habría que comenzar a responder preguntando ¿Lo correcto para quién? Lo que está bien y es perfectamente válido para ti, puede ser un gran error para mí.

¿Qué debería hacer?

Otra de esas tediosas preguntas sin respuesta que te obligan a desarrollar ideas con lógicas aplastantes, el problema en este caso es que cada motivo argumentado, encuentra su contrapunto y la discusión se torna un laberinto de infinitos “y si”.

En esta encrucijada me encuentro en este momento, a un lado un futuro laboral, al otro un mundo de conocimientos y un papel y en medio sólo yo, necesitando una decisión, una solución al conflicto un “happy ending”.

Pero ¿Y si…?

lunes, 20 de agosto de 2012

Far away

I wanna succumb to sleep
leave my mind be free
be anything I coul be
travel to nowhere while I dream.

Atrévete

Tu mano en mi cintura,
no te atreves a tocarme
y yo muero por sentir
tus dedos deslizarse.

Descose las costuras
y logra desarmarme,
sin tener ya que mentir
abandonarnos a la locura
y quedarnos sin dormir
todas las noches a oscuras.

jueves, 9 de agosto de 2012

Devastador

Devastador es el sentimiento que te provoca el continuo rechazo.

Me explico, llevo meses buscando trabajo, es difícil encontrar una buena oferta mientras esquivas las miles de campañas veraniegas de teleoperadoras. Nunca echo currículums por echar, es decir, no echo un órdago y apuesto por todas las candidaturas, selecciono las que considero que puedo hacer bien, que soy apta, que si me dieran la oportunidad, quedarían satisfechos...

Rechazada, es la palabra que más veces leo, además en mayúsculas y en rojo, como riéndose de mí, como insultando a mi ego.

Hoy me he aventurado a echar currículums de dependienta. Nunca lo había hecho, pero dado que me rechazan en los campos en los que tengo experiencia, he decidido ampliar el campo (sin ir a saco, me reitero en que soy selecta a la hora de elegir), al fin y al cabo tengo experiencia cara al público y compro mucha ropa, tan mal no puedo hacerlo... pues la primera en la frente.

No hace ni cinco minutos que completé una especie de entrevista online (¡con psicotécnico incorporado!) bastante satisfecha del resultado, es una tienda que me encanta y de la que siempre hago propaganda (gratis). Estaba casi segura de que me llamarían, por lo menos para hacer la entrevista, y entonces ¡Zasca! (o "¡zas! en toda la boca", a gusto del lector) un email nuevo en mi bandeja de entrada, veo que el remitente es ESA tienda, y sonrío ¿tan fácil ha sido? me pregunta mi vocecilla interior... No, claro que no.

Abro el correo y lo leo con atención:

"Estimado/a ********,  (hasta aquí vamos bien)

Nos ponemos en contacto contigo para agradecer tu reciente candidatura para el puesto Dependiente.  (bien, esto pinta bien)

Hemos recibido gran cantidad de solicitudes para este puesto (oh, oh)y ha habido candidatos que encajan más con el perfil que estamos buscando. (trollface) Por tanto, lamentamos comunicarte que tu solicitud no ha seguido adelante en el proceso de selección. (CRACK - mi ilusión hecha añicos)

Y bla bla bla"

(¡¡Nooooooooooo, malditos!! ¬¬) Ahora ya nunca podré volver a esa tienda (mi tienda favorita) con la misma ilusión.

Maldita sea, por mis conocimientos de la tienda era la que más posibilidades tenía, y no han tardado ni cinco minutos en descartarme, y les ha sobrado tiempo... Por lo tanto esta semana no abriré el email, no me apetece encontrarme con una retahíla de RECHAZADA o DESCARTADA. Lo peor de todo es que esto ya me pasó en una tienda de muebles Sueca (no diré el nombre, que está mal visto hacer propaganda) que también me encanta, mi casa es un catálogo de esa tienda, con toques de otras.

Estoy cansada ya, les descarto yo. No tienes experiencia, dicen algunos. No, claro que no, y si nunca nadie me da la oportunidad de tenerla nunca la tendré. ¿Alguien confió en ti cuando empezaste? Qué suerte, ahora hay tantos candidatos que no merece la pena confiar en la gente, para qué, si das una patada a una piedra y salen 100. En mí confiaron hace años... lo que consigo ahora es porque me lo gano, pero... si no consigo nada... ¿será que no me lo he ganado? Tendré que meditar sobre ello.

En fin, cansada y malhumorada no tengo nada más que añadir. Así que: FIN

lunes, 30 de julio de 2012

Please, please

Come to me
get me out of here
kidnap me
be my prince.

Ignore what people think
take me far away from this

Let's fly and fling
Don't say nothing
just come and take me in.

Estos días como hoy

Esos días que te levantas y piensas en el pasado, el presente y el futuro.

Que te sientas en el borde de la cama intentando reunir fuerzas para afrontar un lunes más mientras tu cabeza aún divaga con pensamientos y recuerdos y las letras de las canciones se enmarañan en tu mente tratando torpemente de expresar lo que sientes.

Una vez leí que cuando estamos tristes escuchamos canciones tristes porque buscamos comprensión. Tal vez cuando estamos tristes pensamos triste porque intentamos comprendernos.

Son laberintos de contradicciones y locuras transitorias, son esas ganas de escapar de todo y no poder. Son esas mentiras que nos repetimos con la esperanza de que se tornen ciertas.

http://www.youtube.com/watch?v=49yBfdp_2jo

jueves, 26 de julio de 2012

El visitante nocturno

Me hallaba yo tumbada en la cama, luchando sin ropa contra el pegajoso calor de las noches de Julio en España, intentaba en vano encontrar una postura, un recoveco del colchón en el que hallar frescor.

De repente un terrible estruendo desgarró el cielo que se rompió en cientos de gotas de agua precipitándose contra el suelo. El viento comenzó a soplar refrescado por la lluvia y la tierra revivió oliendo a campo y a húmeda. 

Las puertas de mi balcón se abrieron de golpe, sobresaltándome, y aún con la persiana cerrada, él entró. Acarició todo mi cuerpo erizando mi piel y mi pelo, un aire frío y suave como una brisa marina, el mejor amante que podía desear esa cálida noche.

Me dejé llevar por las sensaciones y caí presa del sueño en brazos de Morfeo. La lluvia arreció fuera y las calles se llenaron del eco de los feroces truenos. No sé cuando ni cómo mi visita amainó y se marchó de mi cuarto. 

Por la mañana el agua también se había ido, no había ni rastro de nada, el cielo se había recompuesto y lucía preciosas nubecitas dispersas y blancas, sin embargo algo aún perdura en los rincones sombríos, su olor, su frescor... El regalo que mi visitante nocturno me dejó.

miércoles, 25 de julio de 2012

Mundo inherte

Planeta muriente
gente indiferente

Vida que se agota
¡Derrochemos cada gota!

Mundo en extinción
¡Encendamos la calefacción!

Tierra en sequía
la civilización en supremacía

Planeta estéril
Gente imbécil

martes, 24 de julio de 2012

Eco

Mi voz susurra tu nombre
para que flote en el viento
quiero que seas mi hombre
y vives en mi pensamiento

Paseo por las calles
pensando en tu recuerdo
no importa donde te halles
te sueño a cada momento

Deseo fundirme en tu cuerpo
espero robar tus besos
tener tu piel en mis dedos
probar la miel de tus huesos.

He perdido el conocimiento
no controlo estos sentimientos
actuemos sin miramientos
no habrá remordimientos
pasión sin arrepentimiento

lunes, 23 de julio de 2012

Baila conmigo

Baila conmigo esta noche
sube deprisa a mi coche
baja esa persiana
traeré el desayuno a la cama
caigamos en el derroche,
te ayudaré con el broche
cierra la ventana
enredémonos con la sábana
perdamos los papeles sin reproche
pero baila conmigo esta noche.

jueves, 19 de julio de 2012

Tú sueñas, yo sueño

Sueño con tenerte
muy dentro de mí
sueñas con soñarme
bebiendo de ti

Sueño con tocarte
y que me toques a mí
sueñas con que el sueño
se vuelva real por fin.

martes, 17 de julio de 2012

Escenas

Mire donde mire
siempre la misma escena
¡Qué pena!
Nadie que te cuide
muchos que te mientan.

El pueblo al rincón
esto ya molesta
Entremos en acción
políticos al paredón
Que empiece la protesta
¡Se acabó la fiesta!

Día de invierno


Día de frío invierno
en las estaciones de mi corazón
todo está congelado alrededor
aquello que toco se rompe
como rota estoy también yo.

Laguna de duro hielo
que antes fuiste agua en hervor,
volcán que lava escupías,
ya no hay nada en tu interior.

Triste día de invierno
que amaneciste de buen color
tuviste tarde agradable
y eterna noche de dolor.
Por fin se acaban tu horas
y con ellas también yo.

lunes, 16 de julio de 2012

Rebelión

Levántate mundo y camina
contra aquellos que te timan
no dejes que nadie te oprima
no permitas que de ti se rían.


Despierta a la gente corriente
que ardan las calles y  tiemblen
a por los de los coleccionistas de billetes
todos luchando en un mismo frente.


¡Rebélate mundo, espabila!
contra los que te lastiman
los que juegan a alquimia
mientras tú comes migas.


Alza a tu gente
sal a la calle y grita
por una vida decente
contra tanta tontería


Levántate mundo, arriba
ha llegado el día
haz caso de esta rima
y organiza ya tus filas.

De caballeros y doncellas...

Caballero de larga cabellera
y armadura ligera
os espero al alba
asomada a mi ventana
al viento mi melena.

El rumor de vuestros pasos
aviva mi impaciencia
¡oh! caballero sin escudo
habéis sucumbido a mi embrujo
esperáis en la vereda
y se hace eterna vuestra espera.

Mas mi invisible armadura
es más gruesa que la vuestra
infranqueable barrera
entre nuestras puertas

Soy humilde doncella
que amor os profesa
y vuestra merced
anhela mi presencia


¡Oh, caballero! en vano esperas
mi armadura no se quiebra
y mi corazón se hiela.

Tributo verde a Neruda

Me gusta cuando comes y callas
porque estoy como ausente
y me ves desde abajo
y mis manos te tocan

Parece que tus ojos estuvieran en blanco
y parece que tu sexo se adapta a mi boca

Tributo verde a Espronceda

Tras diez polvos en la cama
sin ropa, a toda mecha
no quiero más si no hay tregua
tu cipote saltarín.

Bello hombre que llaman
por su hermosura "El Querido"
en toda mi cama poseído
del uno al otro cojín.

La lujuria me ciega,
en la cama gime mi cuerpo
con tus lentos movimientos
olas de semen y sudor
tú sigue rompiendo mi calma
mientras me vuelvo loca
la cama a un lado,
al otro la ropa
y allá enfrente, solo tú.

Tiempo de guerra

Los hombres se acercan con lento caminar
las tripas revueltas y miedo en el mirar
la pena les inunda, es la hora de matar
es tiempo de guerra, no hay nada que hablar.

Las mujeres lo saben, es momento de llorar
sus amigos se han ido y tal vez no volverán
sus vidas se han roto, es la hora del funeral
es tiempo de guerra, no hay nada que hablar.

Los niños sonríen y les despiden al marchar
sus padres se han ido y les quieren llamar
los niños no saben que no van para jugar
su inocencia se ha truncado, pronto lo descubrirán
pero es tiempo de guerra y ya no hay más que hablar.

Cuarteto

Quisiera ser tu ella
que tú fueras mi él
ser yo tu doncella
y tú mi príncipe en corcel.

Rutina

Amarga vuelta a la vida real.

Trabajo atrasado, papeleos, llamadas, envíos, caos! Con lo feliz que estaba yo en Toledo...
Las vacaciones deberían ser eternas, que haga clic en me gusta el que esté de acuerdo. Pasas unos días relajado, sin preocupaciones, sin más quehaceres que disfrutar del paso del tiempo. Y de repente, se acabó, amaneces con el taladrante sonido del despertador, y las vacaciones parecen lejanas, un sueño. 

Parece que los relojes y el mismo tiempo se confabulan en tu contra para hacer que pase extremadamente lento en el trabajo y demasiado deprisa en el descanso. Así, sin previo aviso (o con un aviso muy vago) lo bueno se acaba. Pero, ey, todos sonrientes, que no pasa nada. Habrá más vacaciones, de momento, las últimas toca atesorarlas.

En un lugar de la Mancha de cuyo nombre no quiero olvidarme, disfruté como una enana recorriendo sus parajes. Y en una ciudad de Castilla, que rima con ahora, y que no se ganó en una hora, pasan los minutos mientras trabajo, y no me inmuto!!

Porque las vacaciones, duren lo que duren, siempre son cortas: ¡exijo que se invente una máquina del tiempo ya! Que se pare el resto del mundo, que deje de girar, y así elegir un momento y disfrutar, disfrutar, disfrutar...

domingo, 15 de julio de 2012

Toledo

Qué bonito es Toledo.

No se puede decir otra cosa, sería una vil mentira. Eso sí, hay que estar en plena forma, las calles son como un laberinto de sube y bajas interminables, aunque sin duda merece la pena.

Para visitar Toledo y poder ver cosas (museos, iglesias, conventos, mezquitas, sinagogas...) hay que ser rico, la mayoría de los sitios no hacen ningún tipo de descuento en la entrada, y en todas hay que pagar. Lo más doloroso de pagar fue la catedral, es preciosa, pero el precio (11 euros por persona) hace que desmerezca bastante. Sale a cuenta (para las demás iglesias) coger la pulsera del turista, ves seis iglesias y te ahorras 7 euros con respecto a verlas sin pulsera. Eso sí, es un identificador "guiri" clarísimo, una pulsera de papel rojo intenso con los nombres de las iglesias...

Comer, sin embargo, no está nada mal. No es caro y la comida es rica (al menos donde yo comí). Recomiendo especialmente el Restaurante Típico Alex (se llama así) que está cerca de la catedral, junto a las termas romanas. También, como lugar recogido y encantador hay que hacer mención al restaurante de la Mezquita de la Luz, es un restaurante ambientado con motivos árabes, incluido el menú, y el trato es muy agradable, las bolitas de arroz envueltas en hoja de parra... simplemente, hay que probarlas. Los cócteles sanos (son batidos de frutas) sorprenden, empezando por el tamaño, uno se espera un vasito y te traen una jarra helada de medio litro, recién hecho y absolutamente delicioso. Y para tomar algo por el centro del casco, el café club Legendario. Es un restaurante-bar montado dentro de un patio, es un rinconcito encantador con tres zonas diferentes y cualquiera de ellas merece la pena. La del bar como tal, está decorada como si fuera una bodega, con barriles y tinas, el restaurante-cafetería es como un patio andaluz con una iluminación y un mobiliario muy bien combinado, y la zona del club son las cuevas, grandes sillones y sofás blancos y granates con iluminación tenue y paredes de piedra... encantador.

El último día, dedicado al Alcázar, es precioso y enorme, y tiene dentro el museo del ejército, una inmensa colección de uniformes, medallas y armas, que no se ve rápidamente y donde no se pueden hacer fotos, ni con flash ni sin él. Sorprenden los restos de edificios antiguos conservados bajo el actual alcázar, ruinas  romanas, visigodas, mozárabes, antiguos aljibes y la base de un torreón de la dinastía Trastámara. Tras cuatro horas de museo y varios kilómetros caminados, yo desistí, no acabé de verlo, tienen cosas que realmente merece la pena ver, pero es tal la cantidad de cosas, que abruma y satura, a no ser que seas un forofo del material militar.

Las luces del atardecer sobre el Tajo y la torre de la catedral son dignas de ver, y caminar por la noche sobre las silenciosas calles empedradas de la judería, es una experiencia única.

En resumen, recomiendo a cualquiera que lo quiera ver, una escapadita a Toledo, de al menos dos días, para poder verlo "entero" (me refiero al casco viejo), para comprar una espada de acero Toledano réplica de la de Aragorn, del Cid o de los Templarios entre otros, para disfrutar de los mazapanes o degustar los quesos manchegos. Eso sí, si vais y queréis compañía, llevadme, que yo vuelvo!


lunes, 9 de julio de 2012

Oda a la yerba

Niebla dulce que me llena
me alegra y me enajena.

Bocanadas de aire turbio
dignas de un suburbio

Respirando la emanación
con gran fascinación

Rodeada de su humo,
me relajo, y me fumo.

¡Qué movie-da!

Si os digo que he pasado la noche entera montando un fiestón de espanto en mi casa, no os miento. Solo que lo he hecho sin salir de mi cama: una peli mala + un par de cigarros = mi mente divaga.

Ha sido un sueño vívido de lo más movidito, así que claro hoy, lunes (odio los lunes), estoy super-cansada. 
Tal ha sido el desfase que incluso me extraña y me sorprende no tener resaca, o agujetas... XD
Noche desenfrenada... esta mañana estaba tan enredada en las sábanas que he tenido que pelear con ellas para desatarme y poder salir al mundo. 

Pero lo pasé bien, muy bien. Diría que hasta demasiado bien, pero nunca es demasiado. Además la casa no está destrozada, no he roto la cama, y eso es un puntazo. 

Es una pena que los sueños no se puedan compartir... ;-P

domingo, 8 de julio de 2012

Hey! we're going to Ibiza!

O eso intento, porque si yo quiero ir, y alguien no quiere que vaya...
¿¿Debería quedarme en casa y ceder a su chantaje emocional o irme y pasármelo genial??

jueves, 5 de julio de 2012

Lola

Llegaste a mi vida en Septiembre
pequeña, frágil y con hambre
mordías la mano que te daba de comer
eras un gremlin, pero te bañé.

Viniste conmigo por azar
y entre nosotras hubo complicidad
tú me consuelas cuando estoy triste
y me arrancas sonrisas los días grises.

Me hablas a tu modo
con mirarme lo dices todo.
Pequeño capricho del destino,
donde tú vayas, yo te sigo.

Nombre flamenco portas
muy gitana, te comportas.
Peluda compañera de camino,
contigo nada es anodino.

Ojalá pudiera aullarle a la luna
y darte las gracias por ser mi loba
cuando me miras con tus ojos aceituna
divertida, alegre, juguetona y boba,
así es mi pequeña Lola.

Noche y día

Quiero contagiarte mi alegría
mas tu respuesta es monotonía.

Yo quiero regalarte mil sonrisas
y tú apagas mi euforia con desidia

Es tu indiferencia mi agonía
tú eres noche y yo soy día

Trato de quemar tu frialdad
y agotas mi paciencia una vez más

Busco algo que sé que es imposible
ambos sabemos que soy incompatible.

martes, 3 de julio de 2012

2.920

Dos mil novecientos veinte días
con muchos mases y muchos menos.

El fin disfruta jugando con ellos,
amenazando quedarse y yéndose lejos.

No sabría definir todo ese tiempo,
quizá feliz, quizá triste, quizá eterno.

jueves, 28 de junio de 2012

Reducciones

Es maravilloso trabajar. "Te ha tocado la lotería" dicen algunos. Será verdad, supongo. 

La cosa es que yo no me siento tan afortunada ahora mismo, no sé si será porque en la reunión de personal de esta mañana nos han dicho que a algunos nos bajan el sueldo y a algunos otros nos reducen la jornada (con la consiguiente reducción de sueldo), o porque hace mucho calor y no va el aire acondicionado, pero afortunada, lo que se dice afortunada, no me siento.

Claro que puestos a elegir, no sé ni qué prefiero, si que me paguen menos por el mismo trabajo o que me paguen mucho menos por trabajar un poco menos. Aunque es verdad, que tampoco me puedo quejar de volumen de trabajo este mes,  a ver, luego vendrán las prisas los agobios y las montañas interminables de documentos, pero en lo que va de mes, puedo decir que: me he tocado los güebos (huevos, para los puristas de la lengua). Pero ojo, no por elección propia, que todo lo que he tenido que hacer lo he hecho, no es cuestión de vagancia, es que si no me dan nada para trabajar, tampoco me lo voy a inventar, ¿no?

Eso sí, el jefe ha dicho que hay dos personas en toda la empresa: DOS que se salvan, así que aún hay esperanza para mi. Al fin y al cabo hoy no hay trabajo, es festivo, y aquí estoy, por si suena el teléfono.
¿Seré yo una de esas dos personas? La semana que viene nos dicen que han elegido que nos toque, siempre teniendo en cuenta nuestra situación personal, vamos, lo mejor para nosotros, ya puestos a jodernos, pues que nos duela menos. El caso es que dos suertudos/suertudas van a conservar sus horas y su salario. ¿No es estupendo? 

No sé... ¿Debería cruzar los dedos?

miércoles, 27 de junio de 2012

Me voy...

No sabía dónde ir, y entonces mi cerebro me dio la solución. Tenía que huir, dejarlo todo atrás, y sin pensármelo dos veces subí a mi corcel negro, rápido como el viento; hundí los talones en él y lo hice volar.
Las imágenes pasaban a mi alrededor a gran velocidad y lo sentí cálido y seguro bajo mi ser. La aguja del cuentakilómetros enloqueció y entonces supe que lo había logrado.
Dime muchacha de rojas mejillas
por qué a la luna lloras cuando brilla
por qué del sol te escondes y huyes del día.

Dime muchacha de rojas mejillas
por qué sigues amándolo después de la vida
por qué aún le quieres mientras él te olvida.

Dos

Dos historias distintas
dos principios que terminan
no comienzan, pero acaban
no existen, pero se afianzan.

Dos vidas que convergen
dos almas enlazadas
tan pronto se tocan
tan pronto se separan.

Somos polos opuestos
en un mismo mapa.

martes, 26 de junio de 2012

Esa oscura sensación


Esa oscura sensación que te incita al mal cuando te han dicho que sólo trabajas de mañana, y de pronto insinúan que quizás no. Es similar al sentimiento que te provoca un profesor que te suspende un examen en el que te has dejado el pellejo y el tiempo estudiando. Es la angustia de la incertidumbre del no saber, por unas simples horas. Es mi naturaleza vaga poniendo el grito en el cielo desalentada. Es la voz de mi juerguista interior reclamando fiesta. Es que hace mucho calor y yo quiero echarme la siesta.

lunes, 25 de junio de 2012

Dicterio al medidor del tiempo

Días veraniegos
encerrada bajo techo
enemigo enmascarado
que sois dos
y jugáis conmigo
girando sin control.


Lenta agonía
esperando la salida
con tu cara mecánica 
te burlas cada día.


Incluso cuando duermo
puedo oír tu risa
en mi mente un punteo
tic tac tic tac.

Quiero un farolillo


Noche de fuego y fiesta
Noche de magia, brujas y meigas
Miradas furtivas perdidas en la arena
Deseos fugaces ardiendo en la hoguera
Noche de fuego y fiesta
Noche de cantos, luces y brillos
Hechizo nocturno de olor a madera
Jugo prohibido que embriaga mi testa
Y en el cielo sin destino, un farolillo.

viernes, 22 de junio de 2012

Opinión de Doña Nadie


No sabe uno ni qué pensar.

El caso es que te levantas como cada mañana para ir a trabajar (qué suerte, pensarán algunos) y pones la televisión para que te manipule, te deprima y te mienta mientras desayunas. Vas al trabajo agradecido de que te exploten por una miseria (o si tienes suerte, a hacer algo que te guste, tampoco hay que ser negativo y generalista) y dispuesto casi a lo que sea con tal de que no te quiten el empleo, que el telediario ha dicho que la cosa está muy mala, que los bancos, lo mismo mañana quiebran, que la gente se va del país porque aquí no hay nada, y tú te aferras a lo que tienes por miedo a decir nada. Tal vez si todos guardásemos el dinero bajo el colchón como hacían nuestras abuelas, nos daría igual que un banco cerrara, pero entraríamos en la terrible economía sumergida y eso no se le permite a la clase media.

Eso sólo es para los ricos que pueden estafar a hacienda, tú, como yo, tienes que pagar religiosamente o si no… y ahí está de nuevo el miedo.

La gente con miedo no hace nada. En este país somos muy de refranes, y hay uno que dice que quien no arriesga no gana, pero nadie arriesga, porque nos lo han pintado todo tan mal y nos han comido tanto la cabeza que uno piensa “Ya, pero si arriesgo, si ahora tengo poco, me puedo quedar con nada” y acepta cabizbajo lo que venga con el consuelo de los tontos de pensar que otros están peor, y no quiero mirar a nadie, ni a Grecia (que está igualito que “nosotros” aunque los medios de comunicación nos engañen para que pensemos que “nosotros” estamos mejor, por aquello de mal de muchos…), o de pensar que bueno, total podría ser peor. Por si acaso algunas abuelas espabiladas ya han comprado provisiones de comida enlatada.

El caso es que uno lee las noticias y piensa en la maleta (al menos en mi caso). Creo que nunca en mi vida había tenido tantas ganas de irme fuera, pero esperaré a estar enferma y que mi empresa me eche a los 9 días, porque total ahora el despido es gratis y no les sale a cuenta.

Hablando del trabajo, ahora resulta que la mejor solución para el problema de desempleo en España es despedir a miles de personas de las empresas públicas (hospitales, colegios, ayuntamientos, etc.). Pues discúlpenme, debo ser muy tonta pero no lo entiendo. Yo siempre pensé que lo del desempleo se arreglaría creando empleo, no destruyéndolo. Pero claro, yo no soy política, ni economista, ni una entendida de nada, y a mí nadie me unta el bolsillo para que privatice todo a la vez que me forro, a lo mejor si ese fuera el caso me parecerían unas medidas perfectas.

Y a los funcionarios, que les bajen el sueldo más, que cobran mucho y no hacen nada. Me refiero por supuesto a los funcionarios del gobierno, porque el resto (habrá de todo, claro) pertenece a aquello que llamaban clase media, así cuando te atraquen o te roben y llames a los funcionarios de la policía, como a este ritmo tendrán que ir a patrullar en el triciclo de sus hijos, podrán ayudarte con rapidez y eficacia... Y cuando vayas a un hospital y los funcionarios del mismo te tengan que operar de urgencia, pues te tocará esperar, porque los funcionarios, tienen la mala costumbre de ser personas normales y hacer cosas de gente normal como irse 15 días de vacaciones (¡Qué descarados, sinvergüenzas, con lo bien que viven!) y como ahora ya no hay sustituciones, pues si el quirófano está ocupado cuando llegas ¡Ah, mala suerte! Haberte puesto malo en otro momento. Y claro, ante esta falta de atención, la opinión pública (que es muy sugestionable) piensa ¡Qué mal funciona la sanidad pública, son una pandilla de vagos! Y así dentro de unos años (o tal vez unos meses) será privado y habrá que pagar por todo, pero como en la privada todo se hace con el mínimo personal, pues los problemas serán los mismos, aunque nos convencerán de que es lo mejor, como siempre… (¡Déspotas!).

Y hablando de vagos, leyendo una ley del código penal, tengo clara una cosa: no entiendo nada. Leo la Ley de Vagos y maleantes, y dice que se debe encarcelar, entre otros muchos a “rufianes sin oficio conocido”, ¿Soy la única que ve donde está el problema?

Pero estamos en una crisis, que no es una crisis, nos han dado un dinero con condiciones tiránicas para los ciudadanos, pero no es un rescate. Los perroflautas esos que se empeñan en mostrar su descontento por las calles de forma pacífica, pero multitudinaria, tienen que pagar una multa por tener ideas, y es que pensar estar mal visto, y todos esos perroflautas de todas las edades, profesiones, ideologías políticas etc. se empeñan en hacer que los que mandan queden en evidencia, y eso no puede ser. Hay que llevar a antidisturbios, que son peores que los grises, y pegan por placer, (qué fácil es culpar al que da el palo, aunque sólo sea un esclavo, digo, perdón, un funcionario que hace lo que se le manda porque se juega sus lentejas…) Pero no hay de qué preocuparse, es algo normal, porque cuando las cosas están feas, no se puede hablar de ellas.

No habrá debate de la nación porque no interesa, ¿qué va a decir? Si no puedes decir la verdad porque entonces igual la gente deja de tener miedo y se subleva, mejor no decir nada. Eso sí, ahora los socialistas atacan, diciendo que nunca nadie necesitó tanto un debate de la nación como España…Yo ya sabía que "Spain is different" pero no pensaba que de esta manera, menos mal que es el pueblo el que gobierna con la ayuda del parlamento, que si no...

Viva la Democracia y Viva la Pepa.