Una vez

Una vez me sentí viva, me sentía plena y sin tiempo que perder. Ahora las horas se burlan de mi desde su reloj de pared.
Nada que hacer y a la vez con ganas de hacerlo todo. Tantos momentos libres y preciados inútilmente desperdiciados como si fueran a volver.
Una vez me faltaban minutos para vivir, cantar, soñar y gozar, ahora me sobran todos desde que abro los ojos hasta que me vuelvo a acostar.
Soy una incorformista perezosa que sólo se sabe quejar, sin mover un sólo dedo ni el culo del sofá.